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CONIN La Unión, el comienzo.


El Centro de Prevención de Desnutrición Infantil y Promoción Humana CONIN LA UNIÓN, Rivadavia Banda Sur, Provincia de Salta, comenzó formalmente sus actividades en el pasado mes de abril. Para su funcionamiento se adaptaron unas instalaciones prestadas por el Obispado de Orán, hasta que se construya el edificio comprometido por el Gobierno de la Provincia.


Según la metodología CONIN, se ha conformado un equipo de profesionales, algunos residentes en Salta Capital y otros del lugar, muchos de los cuales ya han recibido la capacitación en Mendoza. Las monjas residentes en el lugar han facilitado la comunicación con la comunidad y han facilitado nuestro trabajo.


Actualmente son atendidos en el Centro 121 niños y 88 madres, en su mayoría de la etnia wichi.


Los programas que se desarrollan en el Centro de Prevención de Desnutrición Infantil y Promoción Humana, CONIN La Unión, están dirigidos a acompañar al grupo familiar a través de la asistencia y educación. La finalidad es fortalecer factores protectores y buscar estrategias para reducir y erradicar los factores de riesgo que se visualizan en el grupo familiar del niño. A través de los niños buscamos la integración de la familia y de la comunidad.


Los beneficiarios directos son niños de 0 a 5 años con sus madres, como así también madres embarazadas desnutridas. A todas ellas se les brindan diferentes actividades educativas que promueven e impulsan estilos de crianza saludables. Las madres, que provienen de comunidades originarias, son analfabetas, para ellas la metodología CONIN les facilita el taller de alfabetización.


En la base de nuestras interacciones se encuentra el idioma como vehículo de comunicación, por lo tanto en esta comunidad necesitamos un intérprete bilingüe, de forma permanente, que nos garantice que los señalamientos, consignas e indicaciones sean comprendidos por las madres y los niños. De este modo nos aseguramos que se cumplan

los objetivos de nuestra propuesta. Nuestras acciones fuera de la planta urbana de La Unión, en diferentes parajes a los que asistimos una vez por semana, replican lo descripto adaptando la propuesta a los recursos edilicios de los que dispone cada lugar.


Queremos que todos nuestros niños tengan un futuro que les permita desplegar su potencial genético para su desarrollo personal y comunitario.

La sonrisa de los niños CONIN ilumina el camino de grandeza de nuestra patria.

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